La campaña de vacunación contra la influenza, inició en el cantón Morona, los primeros días de diciembre y se extenderá hasta el 28 de febrero de 2020, con el propósito de dar mayor cobertura a la población, especialmente para aquellas personas identificadas como grupos de riesgo.
Esta enfermedad, es producida por un virus que afectan las vías respiratorias y se caracteriza por fiebre, dolor de cabeza, dolor de huesos y músculos, catarro, dolor de garganta y tos intensa y duradera.
Según Andrés Morales, Responsable del Proceso de Vigilancia de la Salud, la vacuna que se utiliza es trivalente, que incluye los componentes del Virus de la influenza AH1N1. Según el profesional de salud, en el cantón Morona, se dispone de 17.750 dosis, en donde los principales beneficiarios son niños y niñas menores de 5 años (6 a 59 meses), adultos mayores de 65 años, embarazadas, personal de salud enfermos crónicos y personas con discapacidad.
Además, la campaña se vienen realizando en los 15 establecimientos de salud del distrito, en horario de 08:00 a 17:00. La Vacunación empieza en los Centros urbanos, pasando por los rurales, de acuerdo a como llega la fase de vacunación a cada uno de ellos; se realiza por demanda espontánea, concentración en los Centros Integrales del Buen Vivir (CIBVs), Creciendo con Nuestros hijos (CNHs), Inicial 1, Centros de Desarrollo Infantil; Casa de Acogida y a través de visitas comunitarias por parte de los Equipos Atención Integral de Salud (EAIS) y Médico del Barrio.
Actualmente los profesionales, cumplen con responsabilidad la campaña de vacunación, llegando incluso a zonas de difícil acceso como son: Kashpaim, Miazal, Cuchaentza, Uchi-Suants y Untsuands. A estas comunidades shuar, se ingresa únicamente mediante vía fluvial y caminatas por senderos entre 8 y 24 horas a pie, incluso cruzando ríos para cumplir con su trabajo y así fortalecer el Modelo de Atención Integral de Salud en este rincón amazónico.
Desde el Semanario El Observador, fuimos testigos del trabajo de las brigadas en el Terminal terrestre de Macas, en donde aprovechamos también para recibir la dosis de vacuna que nos va a permitir estar libre de influenza hasta el siguiente año.