No son artesanos, pero aprendieron el oficio y lo practican a diario en el taller de carpintería, alrededor de unos veinte reos que por situaciones de la vida cometieron un error y se encuentran internos pagando una condena tras las rejas en el centro carcelario del cantón Archidona.
Como parte de la rehabilitación un grupo de PPL (privados de la libertad) aprenden un oficio para cuando obtengan su libertad tener una alternativa de trabajo, “Moisés” (nombre protegido) paga una condena de 25 años espera obtener su libertad este año, él se ha convertido en el coordinador del grupo y comparte su experiencia con el resto de compañeros, “empecé como ayudante ahora soy maestro carpintero y me ha servido de mucho para mi rehabilitación, en este taller yo soy el coordinador, no se puede decir el jefe pero soy el que más tiene conocimiento de esta rama artesanal” mencionó.
En este taller de carpintería cuentan con todas las herramientas para realizar cualquier trabajo, desde una cama hasta lo que puedan imaginarse, pero como obtienen la materia prima para elaborar estos muebles, Liliana Vinueza es la directora de la cárcel nos indicó que la madera se consigue gracias a convenios institucionales por ejemplo hace poco llegó en donación un lote de madera del MAE (Ministerio del Medio Ambiente).
“a través de gestión, conversaciones, mirando a ver que madera nos sirve para ser utilizada, lógicamente entre instituciones metemos el hombro para poder salir adelante, lo que tratamos de cualquier forma buscar la manera que los privados de libertad tengan una ocupación y se rehabiliten también” explicó la funcionaria.
La madera entra a un proceso de preparación, en el grupo todos meten mano para cumplir con las obras que están pendientes, perezosas, camas, juegos de sala, comedor, incluso tallan varios objetos en balsa, los productos elaborados algunos son pedidos otros salen a la venta al público.
“ellos participan en el área laboral que es uno de los ejes de tratamiento de rehabilitación, nosotros participamos en presentaciones de ferias donde exponemos los trabajos, en los días de visita vienen y se llevan algún objeto para ser comercializado y con eso ellos pueden generar ingresos y ayudar a su familia” puntualizó Vinueza.
Con este tipo de proyectos e iniciativas laborales los administradores de la cárcel les dan la pauta a los privados de libertad a futuro cuando salgan tener una oportunidad laboral para reinsertarse y ser útiles a la sociedad.