Inicio Noticias Balacera en un barrio de Puyo causa alarma en toda la ciudadanía

Balacera en un barrio de Puyo causa alarma en toda la ciudadanía

por Andres Ortega

La tranquilidad de la noche en el barrio Intipungo, para amanecer el sábado 9 de julio, de pronto se vio interrumpida, por una cantidad de disparos que puso a todos los nervios de punta en las calles Tungurahua y Severo Vargas a pocos pasos del Hogar del Adulto Mayor Tomás Romero Gross.

Los disparos fueron de tal forma que se los vecinos lograron contar por lo menos 20 tiros que despertó a todo el vecindario. Inmediatamente dieron parte a las entidades de seguridad y en pocos minutos el lugar se llenó de policías y agentes de seguridad, la noche, entonces se convirtió en día a tan tempranas horas de la madrugada.

Al día siguiente las evidencias de los disparos eran notables, grandes agujeros en las verjas de una vivienda, también en un camión que estaba estacionado y algunas vainas que quedaron en el piso, que luego fueron recogidas por el equipo de investigación para el parte correspondiente.

Nadie sabía a ciencia cierta lo que pasaba y rumores iban, rumores venías: que se trataría de un ajuste de cuentas, mal reparto e incluso disputa de territorio entre bandas dedicadas a actividades ilícitas.

Pero fue el informe de la policía la que más o menos orientó de qué es lo que se podría estar tratando, todo indica que es un amedrentamiento por incumplimiento de pago a un coyotero.

Se dijo que aproximadamente seis personas montadas en motocicletas habían concurrido a una casa en donde se conoce que vive un ciudadano de iniciales JQ, en donde sacaron a relucir armas de fuego, habían realizado los disparos y luego se retiraron hacia la avenida principal.

La policía descarta que es se trate de una riña entre bandas, aparentemente se trata que es un caso de coyoterismo, porque anteriormente la familia ya había recibido una amenaza por incumplimiento de pago al coyotero y que pretendían cobrar su dinero. Lamentablemente la familia se ha negado a dar más información, quizá por temor a que los amenazantes pudieran cumplir con las amenazas, pero lo hecho es que la policía recogió al menos 17 cascos de bala caídos en el piso.

En definitiva, se trataría de un caso de coyoterismo en donde una persona dejó una deuda que no ha sido cancelada y que ahora aparentemente la familia se siente amenazada, porque los sujetos que pertenecen a bandas organizadas buscan recuperar su dinero a como dé lugar.

Deja un comentario

* Al utilizar este formulario, usted acepta el almacenamiento y el manejo de sus datos por parte de este sitio web.