Hilda Cerda de Asociación de Productoras Kichwas de Ahuano, es una d elas precursoras de la visión sobre “Las mujeres de Ahuano y su plan de prevención”, ella se ha dedicado gran parte de su vida en actividades que promueven la defena de los derechos de las mujeres del campo, su análisis está basado en los procesos de evolución de la organización a la que representa, nos hemos organizado para fomentar la prevención de la violencias, esta se han naturalizado y ahora tratamos de desnaturalizarla, queremos arrancar de raíz esa posición de evitar la denuncia a los hombres que nos hacen daño, más bien yo les digo a mis hermanas que deben expresar y comunicar su dolor para evitar algo màs grave”, manifestó a nuestro medio de comunicación la líder que además indicó que ella junto a sus colaboradoras continuarán con su labor para evitar cualquier tipo de violencia, la cual en su forma o contexto, ahora es tipificada en la Ley, “hay mujeres que no reconocen que están viviendo violencia en sus hogares, por eso no reaccionan para pedir ayuda”, puntualizó.
Según el mapeo de feminicidios Ecuador, tan solo al cerrar el año 2022 se registraron 209 casos, de los cuales 82 mujeres eran madres, 5 de ellas estaban embarazadas, 32 mujeres habían reportado a las autoridades antecedentes de violencia, 8 mujeres tenían una medida de protección administrativa (boleta de auxilio), 13 mujeres sufrieron abuso sexual. En la Región Amazónica: Sucumbíos reportó 4 casos, Orellana 4, Napo 1, Pastaza 1, Morona Santiago 1 y Zamora Chinchipe no registra.
Mama Inés Tanguila curandera y partera de Amupakin, sostiene que ante ests cifras mucho se arraiga la violencia desde las generaciones que anteceden a las infantes, en su caso el legado es positivo, “Nací en la comunidad de Poroto donde vivía mi mamá. Cuando tenía 12 años, mi abuelo era shaman y partero, como yo era la primera nieta, me quería mucho y sabía llevarme donde tomaba Ayahuasca. Por curiosidad, yo siempre veía y de ahí empecé a aprender poco a poco. Él me llamaba y me enseñaba cómo acomodar al bebé, ahí me dieron los dones. Me dio de todo, para curar y para sembrar plátano, yuca, maíz. Ahí mismo van todos los pajus o dones”, la vivencia que Inés Tanguila heredó ayuda ahora a cientos de mujeres que la ven como un referente, cosa que no ocurre en los propios hogares de las mujeres que sufren, para ella los derechos han sido relegados y ocultos para las nuevas generaciones.
Así como Inés, 60 lideresas de la Amazonia continúan promoviendo desde lo bueno de sus comunidades los “retos y desafíos de las mujeres indígenas”, esta agenda inició el pasado 5 de septiembre del 2022 por el Día Internacional de las Mujeres Indígenas, y continua vigente este 2023.
El programa “Retos y Desafíos de las Mujeres Indígenas – Cumplimiento de la Agenda 2030” es una campaña “Por una vida libre de violencia y una sociedad de iguales”, impulsado desde el Observatorio Ciudadano a la Aplicación de la Ley Orgánica Integral para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, iniciativa que apenas arranca y que busca la socialización de los derechos de las mujeres kichwas, se espera que este 2023 las campañas las junten en los lugares más remotos de la región, sitios en donde aún la esperanza de mejores días para niñas y mujeres aun no muere, indicaron.