La Agencia de Regulación y Control Minero fue agredida por los habitantes de la comunidad Puni Cotona, esto ocurrió en un control antiminero en el que los técnicos fueron acompañados por militares.
Llegaron de forma sorpresiva para la inhabilitación de equipo caminero sin sospechar que los comuneros estaban organizados.
Según versiones de uno de los testigos, de quien nos reservaremos su nombre real y lo mencionaremos como José, los habitantes de esta populosa comunidad estaban armados.
“Dispararon, salieron contra la gente de ARCOM y los militares dispuestos a matarnos, eso vi yo, nadie se imaginó tremenda emboscada”, indicó José, quien miró a un militar caer y lleno de sangre en su pierna.
Al instante en el que atacaban los comuneros, los efectivos militares contratacaron tácticamente, neutralizando a dos individuos.
Después de desarmar a los incitadores, fueron detenidos y puestos a órdenes de las autoridades competentes, siendo las sanciones graves, puesto que estaban armados.
Respecto al uniformado militar, se supo que estaba estable y la herida de bala no era profunda.