En días anteriores habían planteado una solicitud que se respete el espacio para estacionamiento de los vehículos en el tramo de la calle 24 de mayo que corresponde al mercado La Merced, tomando en cuenta que el diseño prevé la ampliación de las aceras lo que dejarían sin espacio para los vehículos.
El alcalde supuestamente les habría prometido acatar su pedido, considerando que se trata de un sector comercial que depende exclusivamente de la llegada de los ciudadanos a adquirir sus productos.
Pero oh sorpresa, “las palabras se fueron con el viento” y vieron que los trabajadores comenzaron a ejecutar los trabajos de ampliación de las aceras, lo cual molestó mucho a los comerciantes al punto al punto que tomaron la decisión de salir e impedir el desarrollo de los trabajos.
Ellos se confiaron en las palabras del alcalde y se niegan a creer que les haya mentido, una palabra empeñada se tiene que respetar, pero en la realidad no está sucediendo como se acordó porque los trabajos siguen con su diseño.
Este es un pedido que no lo hacen solo los comerciantes del mercado la Merced, sino también de los frentistas y locales comerciales que miran que sin los parqueaderos las ventas disminuirán y se verán afectados, pero dicen que están a tiempo y quieren que la calle quede como estaba en lo que tiene que ver al ancho de las aceras.
Vista la actitud de los comerciantes, los trabadores y maquinaria se retiraron del lugar, por falta de garantías para poder seguir con los trabajos y cumplir con los plazos establecidos dentro del contrato.
El ingeniero Raúl Cárdenas, como responsable de la obra, les explicó que ellos solo están cumpliendo con los diseños de proyecto tal como se les entregó y para lo que fueron contratados, que el consultor en su debido momento debió haber socializado con todos los sectores y explicarles claramente cómo se tiene planificado para poder hacer el diseño y es allí donde los moradores y comerciantes debieron haber puesto todos los criterios para hacer respetar su voluntad.
Lamentablemente como contratistas no pueden hacer nada, más bien todo acto que frene el buen desarrollo de los trabajos les perjudica puesto que no podrán cumplir con los plazos establecidos y esto tendrá que poner en conocimiento de la autoridad. Ahora son los técnicos del municipio los únicos que podrían hacer un cambio en el diseño original y poner en conocimiento del contratista. Mientras tanto retira al personal para derivarlo a otros frentes del proyecto para seguir avanzando hasta que se le de nuevas disposiciones.
