A un mes de que se les cerraron las puertas del espacio cubierto del barrio Mariscal, los comerciantes que siguen todavía expendiendo sus productos en la parte externa señalan que están abiertos al diálogo con el alcalde Germán Flores para que se les escuche y se les brinde la mejor alternativa para su reubicación.
Pedro Arévalo, vocero del grupo señala que no se oponen a la construcción del nuevo mercado, están totalmente de acuerdo con el proyecto de la actual administración, pero exige que se les socialice un verdadero plan de contingencia y una propuesta que les brinde una solución.
Reconoce que en realidad hoy es un mes que in grupo de comerciantes autodenominado productores agrícolas, aceptaron la reubicación hacia el espacio cubierto del barrio La Merced, que fueron ellos mismo lo que solicitaron la reubicación y no fue que el municipio les obligó a la reubicación.
Pero jamás se ha socializado con su grupo la posibilidad de la reubicación, por lo cual nunca se les brindó una alternativa para resolver su situación, viendo que también son gente pobre, madres de familia que necesitan ganarse el sustento para sus hogares, la reubicación se la hizo solo con el grupo de los productores.
Luego de ello, sucedió que una noche del 21 de noviembre, llegaron trabajadores del municipio le sellaron la entrada al espacio cubierto, soldaron las puertas y los dejaron a la intemperie, de ahí acá llevan ya un mes haciendo resistencia y allí se van a mantener hasta que se comience los trabajos de la construcción del nuevo mercado.
Ahora les han dicho que están abiertos al diálogo, ellos también señalan que están abiertos al diálogo, pero que se les muestre un plan de contingencia, un informe del cuero de Bomberos, otro Gestión de Riesgos y la propuesta para su reubicación.
Ahora se señala que desde los primeros días del mes de enero se llegarán con la maquinaria para el proceso de derrocamiento del mercado, pero no se les ha brindado ninguna solución, ni se les ha mostrado hasta ahora un plan de contingencia, la mayoría de ellos son gente de las nacionalidades, grupos vulnerables y personas con discapacidad que necesitan ganarse su sustento.
Por parte de ellos están tomando acciones y ya han presentado una denuncia hacia la Defensoría del Pueblo.