A nivel nacional se ha conocido sobre el desabastecimiento y especulación de precios de varios productos entre ellos los de primera necesidad y legumbres, en una visita realizada por nuestro medio de comunicación a los dos mercados de Tena pudimos constatar que los precios están por encima de los que hace una semana se encontraban; por ejemplo los pimientos que por unidades los vendía siete por un dólar, ahora cada uno tiene un costo de setenta y cinco centavos, la libra de ajo antes tenía un costo al público de un dólar con cuarenta y cinco centavos, pero después de las paralizaciones por unidad cuesta un dólar; este cambio que ha generado molestias a todos quienes intenta suministrarse de lo poco que hay, ha sido denunciado en medios de comunicación locales y se ha trasladado la inconformidad ciudadana a la intendencia, sin respuesta de las autoridades ciertos comerciantes se han aprovechado de la situación vendiendo hasta por seis dólares una cubeta de huevos.
Increíble o no, los precios se dispararon por la falta de muchos productos de gran consumo gracias a los cierres de vías, pero ¿por qué esto también ha afectado a los productos no perecibles de primera necesidad?, según María, comerciante oriunda de la serranía, los incrementos aunque sea por centavos mínimos en las cosas, ocurre por la subida del precio de los combustibles.
Las instituciones afines a las mesas de trabajo como Ministerio de Transporte y Obras Públicas, Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Gobernación, Agencia Nacional de Transito, Intendencia han intentado mediar con la dirigencia indígena en los trayectos cerrados por los manifestantes; el intento de cruzar alimentos desde algunos puntos no ha sido positivo, si en algunos casos lograron pasar varios productos en los primeros días de las manifestaciones el consumidor final fue el más afectado por los peajes que pagaron los dueños de los camiones a los indígenas.
Desde el 16 de junio en los mercados varias vendedoras de comida preparada protestaron por el incremento de las legumbres las cuales son utilizadas para la preparación de almuerzos, ellas manifestaron que no podían subir el costo de cada presentación de sus menús porque perderían la confianza de sus clientes, en ese sentido las comerciantes de la zona también protestaron en conjunto con las vendedoras de la serranía por el alto costo de la vida, todas coincidieron que actuarán según se vaya dando el traslado de sus productos y como les cobren los transportistas, ellas dijeron en su manifestación interna que “no pueden vender para perder”.
En cuanto al precio de carnes la libra del pollo se vende a dólar cuarenta centavos y la de carne se mantiene a dos dólares con setenta y cinco centavos, precios que al menos se no han subido aseguraron las mismas vendedoras porque están aún abastecidas.