En un emotivo discurso, el coronel Cristóbal Espinoza se despidió de sus soldados y del pueblo de Pastaza a quien le sirvió al frente de la Brigada de Selva No 17-Pastaza, por el lapso de un año y cuatro meses.
Agradeció a quienes de una u otra manera, le apoyaron en el fiel cumplimiento de su labor, de manera especial a las autoridades como el alcalde del Cantón Mera Gustavo Silva, quien le apoyó con maquinaria para el mejoramiento de las instalaciones del fuerte militar, también al prefecto André Granda que también le dio una mano y al gobernador de Pastaza Rolando Ramos con quien supo coordinar el trabajo de la mejor manera, sobre todo el lo que fue el momento trágico de la caída del helicóptero en el cual fallecieron tanto personal militar como civil.
El coronel Espinoza ahora pasa a ocupar un puesto de director de intereses interinstitucionales en el Comando General del Ejército en la ciudad de Quito, a donde se traslada a servir a su patria acompañado de su familia.
Señaló que en las tres provincias: Napo, Pastaza y Morona Santiago, donde le ha tocado permanecer por asuntos de su trabajo, deja grandes y dilectos amigos y la satisfacción del fiel cumplimiento a la misión y buenas relaciones con los medios de comunicación.
Fue un soldado en contacto directo con los suyos y con la ciudadanía, siempre en la trinchera, en las vías, en el interior de la selva a veces riendo, a veces llorando, sangrando, sudando, pero siempre al contacto con las personas.
El momento más doloroso que le tocó vivir, fue el haber tenido que enterrar a sus compañeros caídos en el fatal accidente aéreo.
Le queda la gratitud inmensa para con todo el pueblo de Pastaza y un mensaje a la juventud que siempre sueñen en alto, sueñen en grande y nunca descansen hasta hacer realidad sus sueños, no se contaminen por nada en el mundo. Jamás se olvidará de la Amazonía y espera retornar nuevamente dependiendo del mando y dependiendo de lo que pase en adelante.
Está convencido que ha luchado en la noble tarea de velar por la seguridad del pueblo en un conflicto híbrido que ahora nos ha tocado vivir, pero siempre buscando el bienestar de todos, manteniendo la paz y trabajando por el desarrollo de todos los pueblos.
La brigada cumple y seguirá cumpliendo con los medios que tiene su tarea de defender la integridad de la patria y de la seguridad de su gente. Para ello, el deseo de los mejores éxitos a quien ingresa a seguir con el trabajo.