Las mujeres rurales de la Asociación Lumu Sisa Warmi de la comunidad Ongota, provincia de Napo, aprendieron a elaborar bioinsumos, en la Comunidad de Aprendizaje implementada por el Ministerio de Agricultura y Ganadería.
El propósito de estas capacitaciones es fomentar la agroecología, garantizando el bienestar y la seguridad alimentaria de las familias del sector.
Javier Clavijo, técnico del MAG en Napo, aseguró que entre los temas de la capacitación estuvo la multiplicación de microorganismos eficientes, que restablecen el equilibrio microbiológico del suelo, mejorando sus condiciones físico-químicas, incrementando la producción de los cultivos y su protección; además conserva los recursos naturales, generando una agricultura sostenible.
Narcisa Licuy, presidenta de la asociación Lumu Sisa Warmi, indicó que aprendieron a elaborar abono orgánico a base de recursos existentes en la propia naturaleza. “Esto también nos beneficia económicamente al evitar comprar agroquímicos que tienen un alto precio en las casas comerciales”, dijo.
En este proceso de capacitación el MAG entregó una caneca de melaza y un quintal de polvillo de arroz, dotación que servirá a las productoras para generar alrededor de 3 mil litros de bioinsumos.
La esencia de las Comunidades de Aprendizaje es conjugar el rescate de conocimientos ancestrales y combinarlos con la innovación tecnológica, para mejorar sustancialmente el proceso de producción de la agricultura familiar campesina, haciéndola sustentable y amigable con el ambiente.