El apacible rostro de una sobreviviente de cáncer de mama sigue siendo la imagen que atrae a miles de mujeres de Napo, quienes aún no han experimentado una valoración médica para detectarlo.
“Queremos que las mujeres estén tranquilas después del examen inicial, es la forma en la que la empresa privada nos está ayudando, por ello yo me he unido para hacer la campaña que promueve primero la autoexploración y luego la valoración de los profesionales a fines al tema”, indicó Mery Gallo, quien además fue una de las mujeres que posó frente a una cámara fotográfica para mostrar al mundo como son las cicatrices que deja el cáncer.
La portada fue impactante y su cicatriz que fue expuesta, permitió que se recaude recursos económicos para otras mujeres que no disponen de dinero en medio de sus tratamientos contra el cáncer; después la campaña en la que inició sus actividades altruistas, Mery continua de manera local con estas iniciativas.
Conferencias, ruedas de prensa y otras ideas han permitido que más mujeres como Mery se sumen a grupos como “Jóvenes Contra el Cáncer”, quienes impulsan el chequeo a tiempo de ciertas dolencias que desencadenan estos tipos de enfermedades catastróficas.
Volviendo a la fotografía de Mery, y a las nuevas campañas en Tena, más activistas ahora se han animado a contar sus experiencias como pacientes oncológicas, el único propósito es sensibilizar a las autoridades nacionales sobre la falta de medicinas especializadas y tratamientos para el cáncer de mama.
En Ecuador cada año 356 mujeres mueren por cáncer de mama avanzado por la falta de un auto examen, así mismo es importante resaltar que de cada 8 mujeres en el país, 1 será diagnosticada con cáncer, por eso es muy importante recordar que las mujeres deben acudir a su ginecólogo de manera periódica.