– Oiga, compadre Ulbio, ¿qué le parece si vamos a caminar un poquito por arriba el paso lateral y luego regresamos hasta aquí mismo?
– ¡Ele, que’s pues, compadre Indiscreto! ¡¿Cómo así se le ocurre eso de ir a dar tremenda vuelta de gana?!
– Pues, para ejercitar las piernas, pues compadre. ¿No ve que se viene la gran Caminata de la Fe? Y hay que estar preparados físicamente para visitar a la Virgencita de Agua Santa.
– Pero todavía no es Semana Santa. Eso ha de ser la otra semana. ¡De gana se apura!
– Es que, parece que este año se adelanta la caminata; para que no afecte al turismo de nuestra provincia como siempre ha ocurrido.
– ¿Y de dónde saca usted eso? ¿Quién ha dicho o qué?
– Así lo anunció nuestro flamante gobernador Rolando Ramos, que la vía se cierra este viernes por la caminata y el domingo ya es domingo de ramos.
– ¡¿O sea que el domingo es día del gobernador?!
– ¡Nooo! Es el tradicional domingo con el que inicia la Semana Santa y hay que bendecir los ramos.
– ¡¿Hay que bendecirle al gobernador?! Bueno, creo que sí le hace falta; con tanto lío que hay en esta provincia.
– ¡No pues, compadre! ¡Si será usted también! Me refiero a los ramos que hay que llevarlos a bendecir, como lo hacían nuestros antepasados. Aunque… viéndolo bien… si hay unos Ramos que no les caería nada mal un poco de agua bendita.
– Ah claro, ya sé que se está refiriendo a los ramos que hay que llevarlos al templo para bendecirlos. r?
– Pero también me estoy refiriendo al señor gobernador y a otros Ramos que conozco, y que andan como diablo en botella, como el periodista de GalatasTv, Diego Ramos; y también el Wilson Ramos, que era director de turismo del Municipio de Pastaza, por mencionar a unos cuantos. ¡¿No ve?! ¡Hay tantos ramos! Que, nuestro Puyo, debería ser de por sí bendito, jeje.
– ¡Ay, compadre! ¡Usted me marea! ¡Ya que ramos con mayúscula, ya que ramos con minúscula! ¡No se me vaya por las ramas! Por eso yo mejor ya no creo ni en ramos ni en ramas de ninguna clase.
– ¡Vaya, compadre! ¡Usted como siempre incrédulo y medio hereje! Alejado de las cosas de Dios. Yo, en cambio, soy bien creyente; los ramos hasta milagrosos son y ahuyentan a los malos espíritus.
– ¡¿Milagroso el gobernador?! ¡¿Por dónde pues? Si el no ahuyenta ni a los perros que le ladran, jeje. Le critican, le hacen memes, le mandan indirectas y él nada. Como quien dice: el que calla otorga.
– Yo estoy hablando de los ramos benditos, que uno los lleva para la casa y los pone en un lugar especial para ahuyentar los malos espíritus de la casa. A usted también hay que ahuyentarle los malos espíritus para que se le quite lo tarugo, jeje.
– nomás no ofenda, compadre, que no le respondo como se merece porque ya estamos cerca de domingo de ramos; como quien dice empieza la semana mayor y voy hacer como dijo Jesús: si te pegan en una mejilla, mejor ofrécele la otra.
– Así como el gobernador, que le dicen de todo y él mejor ofrece la otra mejilla. Parece que está de candidato para colgarlo junto a la cruz de Jesús.
– ¿De buen ladrón o de mal ladrón?
– De buen ladrón, pues compadre, claro está. Porque, para mal ladrón, ya tenemos a muchos otros candidatos. ¡Hasta de sobra! Y no quiero decir sus nombres, pero usted ya se los imagina, jeje.
– Yo no me imagino nada compadre, porque yo no soy mal pensado como usted. Mejor irá a confesarse, a ver si suelta todos sus pecados.
– Yo mejor me lavo las manos como Herodes.
– ¡Ele! ¡Qué bruto, compadre! Si el que se lavó las manos no fue Herodes sino Poncio Pilatos.
– ¡Que’s pues! ¡¿Y acaso Herodes no se lavaba las manos?! ¿O era cochino?
– ¡Ach, compadre! ¡Usted siempre sale con sus cosas! Pero, hablando de crucifixión, por ahí hay otro que lo quieren crucificar también; ya escuché que están promoviendo la revocatoria de mandato, porque dizque no ha cumplido con sus propuestas de campaña y hasta ahora no se ve ni una obra.
– ¡Sí ha de ser, compadre! Ahora con tanto judas que ronda por allí, en vez de: “¡Crucifícale, crucifícale!” ahora tocará gritar: “¡Revocatoria, revocatoria!”
– Y usted, ¿qué opina compadre?
– ¡Revocatoria, revocatoria! ¡Ya que churos! Jeje.