Por: Edwin Mosquera G.
Existe confusión entre las personas del País de Manuelito entre el término reelección y candidatizarse, partiendo del primero, significa que en una designación de elección popular aquel individuo que ostentaba un puesto ha sido nuevamente ganador de los comicios electorales, por otra parte, la candidatura es un derecho tipificado en el Art 61 de la Carta de Montecristi, entonces, el volverse a candidatizar, no implica que se va a reelegir.
Con esta introducción, ¿misógino por qué?, con la última visualización del primer mandatario en la alfombra roja de la Asamblea Nacional con sus zapatitos de plataforma (versión criolla de Wednesday Adams) claramente se evidencia la sintomatología de su complejo napoleónico y la imagen que pretende proyectar frente al ente vincular femenino que sería su esposa, pero la proyección de su sintomatología solo se evidencia con su pareja o también lo hará con todas las mujeres de su círculo.
Respondiendo el cuestionamiento que antecede, el vivo ejemplo de la soberbia es el encargo que DEBERÁ realizar a la Vicepresidenta, más sin embargo ya se escuchan las leguleyadas jurídicas que se pretenden realizar, si bien es cierto ante la ausencia simultánea del presidente y la vicepresidenta el presidente de la Asamblea Nacional deberá asumir el cargo ejecutivo si el plazo es menor a un año, cosa que no encuadra en el debate, peor aún en el caso que se indica que por ausencia de la vicepresidencia temporal se podrá encargar a un ministro hasta que el vicepresidente sea delegado, pero la designación de encargo de presidencia le corresponde a la vicepresidenta de la república electa, ya que como es de conocimiento público, nuestro flamante primer mandatario envió a que se juegue el pellejo desde que nombrada por el jefe de Estado como de embajadora extraordinaria y plenipotenciaria ante el Estado de Israel, entonces no existe esa ausencia voluntaria que se pretende hacer creer por ende no cabe ni una designación de un vicepresidente peor aún el encargo a un ministro.
No puedo entender por qué las mujeres, feministas, feminazis o cualquier movimiento femenino no se ha pronunciado hasta ahora sobre el atropello que están viviendo, es más hasta recientemente les cambiaron de competencias al famoso MINISTERIO DE LA MUJER, ente que a decir de su titular custodia y vigila el cumplimiento de sus derechos, parece que el paroxismo histérico cambio de utilizar un dildo de madera por un parapeto de cartón que ahora utiliza plataformas.