Una ceremonia cargada de simbolismo se vivió la mañana del domingo 14 de mayo, en el marco de la instalación de André Granda como Prefecto Provincial de Pastaza y Lineth Calapucha como viceprefecta.
Dentro de la ceremonia estuvo la presencia del obispo de Puyo Mons. Rafael Cob y el pastor evangélico Roberto Rubio Valencia de la iglesia Luz del Evangelio. También la presencia del Yachai Chango de Cotococha, quien dirigió la ceremonia ancestral de la limpia a las nuevas autoridades del GAD Provincial y le entregó el bastón de mando al Prefecto.
En su discurso, Granda recalcó que, durante la historia del Gobierno Provincial, se había instaurado un modelo clientelar con estructuras de corrupción, que han buscado el beneficio propio y no de las mayorías. “Por tanto, primero hay que poner en orden la casa, limpiar el sistema de corrupción enquistado, aquí se terminan las coimas, los pedidos de dinero” indicó.
Hizo un llamado a los proveedores, contratistas y funcionarios, indicando que se terminan esas prácticas, no se va a tolerar los actos de corrupción, y no habrá segundas oportunidades para quienes resulten involucrados.
Luego, firmó una declaratoria para crear el Código de Ética del Gobierno Provincial, que oriente las actividades honestas y de gestión en favor de todos los sectores de la provincia y de atención prioritaria a las comunidades indígenas históricamente olvidadas.
Por otra parte, Granda, anunció la creación de la Dirección de las Nacionalidades y desde el Patronato Provincial el Proyecto Warmi Pastaza; para la prevención de la violencia de género. Además, se dará impulso a la bioeconomía y el turismo como motores del desarrollo sostenible.
El Prefecto, dispuso el diseño del nuevo edificio del GAD Provincial para la atención a la gente de todas las comunidades. Dentro de su plan de trabajo, conectará a la provincia con un sistema de transporte multimodal, y un programa urgente de mejoramiento de las pistas comunitarias.