El desprendimiento de uno de los cables que sostienen al puente sobre el río Napo en la Parroquia Mishaualli, enciende las alarmas a comuneros y actores turísticos en vista que esta infraestructura puede colapsar, la prefectura realiza trabajos de reparación y se prevé la suspensión del tránsito vehicular aproximadamente unos 90 días.
Un fuerte estruendo en horas de la madrugada por el desprendimiento de un cable despertó a los vecinos que residen en las cercanías de este viaducto, “A las 2 de la mañana aproximadamente sucedió eso, pensaba que se cayó algún carro al rio, pero fue el cable, suerte que sucedió en horas de la madrugada que hubiese sido si eso pasaba durante el día cuando hay más tráfico incluso peatones” indicó Gloria Olives moradora del sector.
La situación ameritó la inspección de profesionales del GAD Provincial de Napo para evaluar los daños en la estructura, tras la valoración técnica decidieron suspender el tránsito vehicular por tres meses mientras tarde la ejecución de los trabajos, “Hemos verificado en el sitio, en la punta de la torre, los cables que sobran también están averiados, lo que podemos ver que ahorita está soportando el peso del puente un solo cable y es peligroso” mencionó Mauricio Carrera técnico del GAD Provincial.
Esta infraestructura enlaza a importantes zonas productivas y turísticas situadas a lo largo y ancho de la vía en su margen derecho al menos 2 mil personas estarían afectadas, por lo que a sus habitantes les preocupa el cierre temporal cuando su única fuente de ingresos es el turismo, “Esto va hacer peor ahora que nosotros pretendíamos reactivar la situación económica, el campo hotelero sobre todo es el que se ha ido a pique en esta pandemia” enfatizó Douglas Clark emprendedor turístico.
Este puente fue construido hace aproximadamente 10 años, pero el tiempo de durabilidad es mucho más, sin embargo, desde que fue inaugurado y entregado a la población este viaducto no ha tenido ningún mantenimiento según los usuarios.