La ola de robos a transportistas no cesa en la provincia de Napo, y ha dejado pérdidas a las familias que han sido víctimas de estos atracos. El testimonio de uno de los taxistas afectados reveló parte del drama que vivió, “tenían acento colombiano, me dijeron que les entregue el dinero y mi celular, que si colaboraba no me harían daño», explicó el conductor de la cooperativa de taxis San Juan de Tena.
Los delincuentes tomaron una ruta posteriormente, después deamenazarlo y de robarle el celular huyeron, “lo que también duele es que el resultado del diario también se llevaron, todo el efectivo», acotó el asustado hombre.
Del primer tono ocurrido la última semana de abril se supo que al propietario inicialmente lo abandonaron en las afueras de la ciudad, luego él pidió ayuda a los moradores de un populoso barrio de Tena.
Ya en San Jorge se realizó una cadena de aviso y varias operadoras salieron a ayudar al taxista, horas después se conoció que la ruta que tomaron los delincuentes fue por la avenida Pano.
El trayecto de intento de fuga de los antisociales no les prosperó en su fechoría, ya que existen carreteras alternas sin salida.
Vecinos de la parroquia Pano, en un grupo de chat comunitario, informaron sobre un taxi abandonado en la entrada a Pumayaku.
Se logró ubicar al taxi el cual fue abandonado después de haber sido chocado, tenía daños, pero eso era lo de menos para el propietario que vivió momentos de tensión.
Otra carrera que también tuvo este oscuro desenlace, fue cuando un socio de la cooperativa Central Tena fue sorprendido por dos sujetos quienes le pidieron les traslade hacia el sector de Las Sogas, en la carretera abandonada y oscura el chofer se percató de que iba a ser asaltado, el hombre intentó fugarse sin embargo, los delincuentes le advirtieron de que no hiciera nada, pues no era el propósito lastimarlo, tan solo requerían del celular del hombre, el dinero y del vehículo para poder huir. Ocurrido el robo los delincuentes se llevaron el automotor, pero en una acción rápida sus compañeros socios de la operadora y otras cooperativas, replicaron el aviso a varios grupos de trabajo de transportistas. Los delincuentes se vieron en aprietos dejando abandonado el taxi cerca del balneario antes mencionado, el vehículo estaba totalmente desmantelado en su tablero, aparentemente las personas que cometen estos delitos saben de cambios de partes y aprovechan el hecho para llevarse los radios, memorias y otros accesorios de los automóviles.
De estos sucesos no hay grabaciones o detenidos, la Policía Nacional está investigando el modo de como operan estas bandas que ya han generado incertidumbre a las familias de cinco unidades del gremio de taxistas.