– Mire, compadrito Ulbio, le cuento la última:… ¡Me compré una guitarra!
– ¡Chiiiii!… ¡Esa será última! Yo pensé que me traía otro chisme callentito. Está bien que se haya comprado guitarra; pero… ¡Ni tocar sabe! ¡Ahora ha de querer que yo le enseñe!
– Para que sepa, compadre, yo de tocar sí sé muy bien; lo que no sé es entonar, jeje. Me la compré para esta noche, para que salgamos a darles serenata a nuestras mujeres.
– ¡¿Nuestras ha dicho?! Eso me suena a porrazo. Yo solo unita tengo. Ahora usted, como es más picaflor que el gobernador, ¿cuántas tendrá que dice “nuestras mujeres”?
– Pues, no se mande, compadre; que yo solo tengo dos: la suya y a la mía. Pero yo me refiero a que salgamos a cantarles canciones por el día de la mujer. ¿Qué le parece compadre? Como dice el Viche: “Mujeres, oh mujeres tan divinas, no queda otro camino que adorarlas” o como dijo Arjona: “No sé quién las inventó, no sé quién nos hizo ese favor, tuvo que ser Dios…”.
– ¡Ese compadre! ¿No ve? Desde ya está inspirado, algo ha de querer, no ha de ser de gana. Porque conociéndolo como es, nada hace de gratis, jejeje. Pero bueno, tiene toda la razón, no sé qué haríamos los hombres si no existieran las mujeres.
– Ya lo dice el viejo y conocido refrán: “Detrás de cada hombre, siempre hay una gran mujer”, ¿no le parece? Y así es. Vea, por ejemplo: detrás del alcalde, está la vicealcaldesa, y su séquito de mujeres… pero, bueno eso es otro cuento.
– Y detrás del prefecto está la viceprefecta y también se ha escuchado que por allí tiene su escondidito, pero que no sepa la Mari Cris, jejeje.
– ¡Compadre Ulbio! ¡No sea chismoso! De ganita va a provocar la destrucción de hogares. Ya le he dicho que no se deje llevar por las malas lenguas.
– Bueno, compadre; pero ya ve, detrás del gobernador está la intendenta… Para muestra un botón.
Ahora no ve, el alcalde arma tremenda rueda de prensa solo para lucirse diciendo que su Vice ha organizado un “Foro Internacional Mujer 2024”, y que él está para apoyarla.
– ¡Y claro! Las flores que sean para el Flores.
– Así mismo, el gobernador, todos los lunes rueda de prensa para saludar y dar paso a que la intendenta informe sobre su trabajo en los operativos del fin de semana.
– ¡Y claro! El que queda bien es él.
– ¿Y el prefecto? Ni se diga. Ya ve como nos salió con que para él no sirven los reinados de belleza. Que las coronas, las reinas y las cortes de honor no van con él.
– Ahora pues, tiene que festejar a las miles de reinas de toda la provincia.
– Pero cada vez son más fuertes los rumores de que hasta con la viceprefecta ya no se lleva, han marcado distancias, cada quien por su lado. Lo que ella era del grupo del “ánimo” ahora disque anda bien desanimada, en el grupo del desánimo, jeje.
– Otro que era del ánimo, y ahora lo veo bien desanimado, es al presidente del GAD de Shell; porque ahora diciendo la de cooosas. Pero bueno no nos salgamos del tema, sigamos con lo de las mujeres. Ahora, como es una de esas fechas llenas de hipocresía, ya los veo rendidos a los pies de ellas, como en San Valentín, regalando flores que, con besos, que con abrazos
– Hechos los zalameros, así como usted.
– ¡Ele! ¡Ahura! ¡De ganita se mete conmigo! Eso no es hipocresía; es ser condescendiente en estas fechas especiales. Como quien dice: “Quiero que brindemos por ella…” Aaah, hoy es un día de inspiración, de poemas hechas canción, es que la mujer es belleza, es encanto es dulzura, es un poema amor. ¡Pero usted que va a saber de estas cosas!… Viejo aburrido.
– ¡¿Aburrido me dijo?! Pues, páseme la guitarra y verá como le canto a mi mujer querida, al amor de mi vida, a mi consentida y páseme la botella que esta noche tengo que brindar por ella.
– ¡Eso, compadre! ¡Así se habla! ¡Hasta que se animó!… y sin ser de Semilla, jeje. Vamos de serenata… Pero, espere compadre… Primero pasemos por la que sabemos y luego donde la propia, diga que sí compadre, jeje.
– ¡No le digo compadre! Si usted es más picaflor que el mismo gobernador, jejeje.