Así como crece la ciudad, también crecen los problemas, es el criterio del presidente del GAD Parroquial Patricio Peralta, por lo que Shell, ya no es la ciudad tranquila de otros tiempos.
En virtud de ello y ante la existencia de algunos sucesos negativos, informó que se está trabajando en un proyecto de video vigilancia, con la colocación de varias cámaras de seguridad y también se está coordinando con el Comando de Policía para un trabajo reforzado en la Ciudad.
Fernando Llerena, es el nuevo teniente político de la parroquia Shell y en los pocos días que lleva en el cargo, está consciente que su mayor esfuerzo tiene que ser en el tema de la seguridad ciudadana. En virtud de ello, se está trabajando en varios operativos de control, articulando el trabajo con todas las instituciones que tienen que ver sobre este tema de la seguridad.
En las reuniones que ha mantenido tanto con la policía y representantes del GAD Cantonal y Junta Parroquial se ha visto un incremento de actos delictivos, por lo que se ha gestionado la dotación de una nueva ambulancia para la parroquia y la presencia de más agentes de la Policía.
También se está trabajando en el tema de las alarmas comunitarias y la creación de propios chat en cada uno de los barrios, para una respuesta más efectiva en caso de registrase cualquier inconveniente.
Ya se tiene determinado los focos de inseguridad, por lo que se está trabajando en función de eso y en coordinación con las demás instituciones como la Policía Nacional. De ser necesario también se pedirá el apoyo de la Brigada de Selva.
También se está trabajando en el tema de los libadores, que se apostan en los bienes públicos, por lo que se está tomando control, también en lo que tiene que ver a otros temas como: diques, balnearios y centros turísticos, a fin de que no hayan inconvenientes, ni con los ciudadanos propios, menos con los turistas.
Finalmente, Llerena informó que también continúan los controles en tiendas y despensas sobre el tema de los productos caducados y que no haya alteración de precios que puedan ocasionar un perjuicio a los ciudadanos; también en lo que tiene que ver al control de los centros de diversión.