En el 2020 ya se pudo dar inicio a este sueño tan anhelado por más de 26 años, desde que se recibió las escrituras comunitarias por parte del gobierno nacional de poder contar con una delimitación de su territorio.
Así se cumplió con una primera minga comunitaria por consenso general que inició el 28 de octubre y culminó el 12 de noviembre, se linderó un primer tramo que corresponde a los límites con la nacionalidad Shuar, en la zona del cantón Arajuno, Shuguacocha, Villano, Curaray, Canelos, Copataza y Villaflora, de lo cual se avanzó en este gran tramo en el que se dejó incluso con hitos plenamente identificados.
Antonio Vargas, líder indígena y curaca de la nacionalidad Quichwa de Pastaza PAKIRU, nos da a conocer que el territorio de su nacionalidad comprende una extensión de 1.125.000 hectáreas, que comprende los cantones Arajuno y Pastaza con un total de 199 comunidades.
Destaca que lo importante de este proceso de delimitación es que se está utilizando tecnología de punta, con la ayuda de GPS, lo cual, además de los hitos y las plantas que se viene dejando de forma física, la información ya queda en el sistema de cómputo, que será más fácil su ubicación.
Destaca que la minga fue una gran fiesta de la hermanda, participó mucha gente cumpliendo con los trabajos de trocha, siembra de plantas para que queden como linderos y luego se podrá los puntos de cemento.
De este primer proceso, vendrá en el 2021 la segunda fase, la cual ya se está comenzando a planificar, que será para delimitar con el territorio waorani y una tercera fase que sería con los Achuar, los zaparos y andoas que todavía hace falta.
Aclara que no se trata de entrar en conflicto de límites con los hermanos de las otras nacionalidades, sino de llegar a acuerdos que les permita tener bien claro sus límites y lineamientos correspondientes a fin de que no haya problemas a futuro y las nuevas generaciones puedan vivir con tranquilidad.
En este sentido, para este mes de enero, se tiene previsto una gran asamblea comunitaria que sería en la comunidad de Villaflora, en la cual se planificará el trabajo y de definirá las mejores estrategias para comenzar el trabajo.
Vargas, argumenta que hay que aprovechar el entusiasmo de la gente, que ahora están todos bien motivados y con ganas de hacer el trabajo. Además, eso les permite fomentar la unidad, integración y confraternidad entre hermanos de una sola familia que en este caso es Quichwa de Pastaza.