Sucedió en la comunidad de Taculín, a 25 km. al sureste de Puyo, en la cuenca del río Bobonaza, en Pastaza.
Una menor que estaba próxima a cumplir 13 años, se quitó la vida colgándose con una bufanda desde el techo de su cuarto, en la casa de sus padres.
Sus familiares se dieron cuenta del hecho cuando lo buscaban para merendar y no encontraron respuesta a su llamado. Cuando fueron a buscarlo en su dormitorio, debieron forzar la puerta para ingresar y se encontraron con el cuerpo suspendido.
Lo bajaron y constataron que aún tenía signos vitales, los que se perdieron mientras llegaba la ambulancia y el médico de la misma, que informó a sus familiares que había fallecido.
La víctima de este acto autolítico, según su madre, Janeth Chimbo, no denotaba ningún estado depresivo, por el contrario, asegura que estaba «muy alegre».
Del hecho, la Policía recién fue informada 12 horas después del trágico acontecimiento, cuando el cadáver ya estaba siendo velado en la casa comunal. Recién entonces, lo trasladaron a la morgue del Cementerio Municipal de Puyo para que se le realice la autopsia de ley.
Juan Carlos Bonilla, jefe de Criminalística de Pasraza, dijo que la menor había ingerido una sustancia, la misma que fue enviada a un laboratorio especializado en Quito para su análisis y se determine de qué se trata.
(Fuente – Siete Días EC)