Como nunca, los locales comerciales en la parroquia Shell fueron clausurados por las autoridades competentes, por no cumplir con las diferentes normativas, según lo informó la intendenta de Policía Yomira Villafuerte.
La autoridad señaló, que el pasado jueves 14 de septiembre, en compañía de la Comisaria Nacional encargada del Cantón Mera, se procedió a visitar los locales comerciales con el apoyo de personal de policía nacional y de la tenencia política del Cantón Mera.
En ese sentido, se procedió a visitar dos establecimientos de categoría 5, en este caso supermercados y un establecimiento de categoría 6, en este caso tienda, dando como resultado que los tres establecimientos fueron notificados por no contar con su respectivo permiso anual de funcionamiento y también al realizar la revisión de los productos de expendio a la ciudadanía en uno de los establecimientos se pudo encontrar varios productos caducados como: café, caramelos, talco y jabón de bebé y botellas de licor sin el registro sanitario, productos que finalmente fueron decomisados para su respectiva destrucción como nada la normativa.
En lo que tiene que ver a los operativos del fin de semana, luego de cumplir con el retiro de libadores en la zona del barrio Obrero, las autoridades se trasladaron al Cantón Mera a la parroquia Shell, en donde se procedió a la clausura de un establecimiento no regularizado que funcionaba a partir de las 03:00 en horario no permitido, esto gracias a las denuncias ciudadanas, hechas dentro de las brigadas de seguridad que se hicieron en este sector.
Para el domingo, en coordinación con todos los comisarios y tenientes políticos de los diferentes cantones, se procedió a controlar el cierre de locales en los horarios establecidos y al retiro de libadores de las calles en los cantones Mera, Puyo y Santa Clara.
En lo que tiene que ver al decomiso de máquinas tragamonedas, informó que se cumplieron con los operativos de los diferentes locales, dando como resultado que ya no cuentan con dichas máquinas, todos han procedido a devolverlas o guardarlas en respuesta a la socialización que se hizo a su debido momento, por lo cual, al momento ya no queda ni una máquina tragamonedas en funcionamiento que están prohibidas por la ley.