Mediante rueda de prensa, dirigentes de la nacionalidad Kichwa de Pastaza, expresaron su preocupación y total rechazo a la presencia del autodenominado Estados Unidos de Kailasa en su territorio. Este grupo que promueve una religión extranjera, habría adquirido una extensión de tierra en la comunidad de Jatun molino en la parroquia Sarayaku, donde piensa radicarse, por lo cual, los dirigentes y representantes de varias comunidades han advertido que no permitirán su llegada y están dispuestos a bloquear toda forma de acceso.
Por tal motivo, instan a las comunas, comunidades, pueblos y nacionalidades a no caer en estafas con este grupo con supuestos ofrecimientos para poder ingresar, a cuidar el territorio y no caer en esta secta que busca comprar tierras para actividades ilícitas, y también hacen un llamado a las entidades de control organizativas y de Estado a establecer medidas de control efectivas.
Luis Canelos, presidente de la Nacionalidad Kichwa de Pastaza, fue claro en aclarar a todas las comunidades que el autodenominado estado de Kailasa no existe, por lo cual, denuncia la violación de derechos de sus territorios, con el arrendamiento de mil hectáreas de terreno en Jatunmolino, por lo cual declara el estado de nulidad de toda acción realizada de manera inconsulta y declara la expulsión de la secta religiosa del territorio Kichwa de Pastaza.
Acotó, que cuentan con todo el respaldo de tanto de la Confeniae que es la organización regional, como también de la CONAIE a nivel nacional, quienes les respaldan totalmente en las resoluciones tomadas y han incitado a las autoridades del Gobierno a proteger el territorio amazónico.
De lo que se conoce, esta organización es una secta religiosa que quiere propagar su religión del budismo a nivel mundial, invadiendo de esa manera la propia cosmovisión que tienen los pueblos y nacionalidades amazónicas. Consideran a la presencia de esta religión extranjera como una violación no solo al territorio ancestral, sino también a la cultura y cosmovisión propia de las comunidades amazónicas.
No se explican, como la presidenta de la comunidad de Jatun Molino Naida Gualinga, se ha dejado convencer para hacer la entrega de mil hectáreas de una manera inconsulta y sin el consentimiento de la asamblea comunitaria, causando con ello una división entre la misma comunidad, también con las otras comunidades y de la nacionalidad kichwa.
En este sentido, han decidido cerrar el acceso tanto en el aeropuerto Río Amazonas de Shell y también las comunidades por vía fluvial están advertidas a no permitir el acceso por canoa.