Hacer hasta lo imposible por salvar la vida de su padre, es la consigna de los hijos de Ángel Acosta, por lo cual, se unieron la tarde y noche del miércoles 16 de junio para realizar una rifa solidaria y recaudar fondos, para con ello poder seguir costeando los medicamentos que necesita para recobrar su salud.
Ángel Acosta, conocido ciudadano de Puyo, gran emprendedor que por muchos años alimentó a las familias en su recordado restaurant “Flamenco Ecuatoriano” en la calle Ceslao Marín a pocos pasos del Sindicato de Choferes Profesionales de Pastaza, y hasta el día de hoy en el restaurant “La Tulpa” en el barrio Obrero, a pocos pasos del Malecón del Río Puyo.
Hoy se encuentra quebrantado en su salud, llevando más de 50 días en la sala de cuidados especiales del hospital Básico El Puyo del IESS Pastaza. Se halla luchando entre la vida y la muerte, demostrando ser un hombre valiente que ha sabido sobreponerse a todas las pruebas aferrándose a la vida y con la esperanza de volver a ver a su familia, retornar a su hogar y poder seguir siendo feliz junto a los suyos.
Son 30 días, como dice su hija Katty Acosta que no ven a su padre, 50 días que han resultado ser toda una eternidad de su ausencia que cada día se siente con más fuerza en el hogar, pero mantienen la fe vida y la esperanza que con la ayuda de Dios todo va a salir bien y pronto lo tendrán de regreso con ellos.
Su esposa Gardenia Pérez y todos los hijos de Ángel se hallan en permanente oración, rezan y le insisten a Dios para que les conceda el milagro de tenerlo de regreso en casa sano y salvo, por ello han agotado hasta el último recurso para poder asistirle con todos los medicamentos a fin de que no le falte nada y están muy agradecidos con los médicos y el personal de salud que están a su cuidado y haciendo un excelente trabajo para sostenerlo con vida hasta el día de hoy.
La rifa que se realizó cubrió todas las expectativas, se vendió boletos más allá de lo que se esperaba al punto de volver a ser otra impresión para seguir cubriendo todas las solicitudes de las personas solidarias que cada día llegaban más y más con el deseo de colaborar. La gratitud será eterna, dice doña Gardenia hacia todos quienes han demostrado su corazón generoso y se han hecho presentes, unos entregando sus obsequios, otros adquiriendo sus boletos, pero sobre todo a quienes se han unido en oración desde muchas partes del mundo por la salud de Ángel Acosta.
Fueron más de 40 premios los que se entregó, entre los dos principales:
- Una Tablet para el número ganador 241 a nombre de Ceira Leonor Ponce
- Una laptop como premio mayor para el número 2861 de Hernán Masabanda