Con 90 años a cuestas, su memoria es un libro de historia de la provincia. En el marco del diálogo, rescata hechos que se han perdido en el océano del tiempo y el olvido.
Como presidente de las juventudes de la provincia, en asamblea consensuada, comprometió el apoyo electoral al capitán Luis Arias Guerra, quien en ese entonces estuvo de candidato a Senador por Pastaza. Esto con la condición de que elabore un anteproyecto que debía ser presentado el primer día de su posesión en caso de resultar triunfador en las elecciones. Y es así como se dividió la provincia de Napo y Pastaza en dos. Así lo mencionó en entrevista exclusiva para El Observador uno de los protagonistas de la historia, el Sr René Robalino.
Nacido en Mera en 1934, recuerda que en aquellos tiempos la vida en el Oriente era muy difícil, siendo que las provincias amazónicas, como hasta ahora, han sido las más olvidadas del país y que más han servido para los discursos rimbombantes de los políticos de turno. Destacó la fortaleza de las personas vivieron y dejaron su vida aquí, cuando no había nada. Fueron ellos quienes crearon una forma de vida en pro del progreso de Pastaza para las futuras generaciones. Y, de hecho, hay personas que han aportado mucho pero que nadie les ha tomado en cuenta.
Cuenta que, a raíz de la Segunda Guerra Mundial, vino la Compañía Shell a instalarse en donde hoy es la conocida parroquia que lleva ese nombre, en virtud de que los Estados Unidos necesitaba ingentes cantidades de petróleo para la generación de combustible y otros derivados que ocupaban los vehículos y maquinaria bélica, por lo que se firmó un convenio con el Estado ecuatoriano, siendo en ese entonces presidente Carlos Arroyo del Río. Ese hecho fue un hito para el desarrollo de la zona, ya que el naciente pueblo, requería una infraestructura básica empezando por la carretera. En aquellos años, la carretera llegaba apenas a Pelileo junto con la línea del tren. Para llegar tan solo a Baños, había que hacerlo a pies por senderos y caminos de segundo orden.
Don René nuestro invitado tiene un sinnúmero de vivencias y anécdotas. Aprovechando que sus padres tenían un negocio que prosperaba, gozó de cierta estabilidad económica que le permitió dedicarse a otras actividades deportivas y sociales. Es así que formó el Club Independiente de Básquet. Y más adelante, motivado por la decepción de que, en los torneos nacionales de deportes, participaban personas que no pertenecían a Pastaza, en representación de la misma, se juntó con los hermanos Fernández, Roberto Basuri y un ciudadano de apellido Muñoz, para conformar lo que sería la Federación Deportiva de Pastaza. Para el efecto y como no tenían un abogado que les asesore, se les ocurrió pedir una copia de los estatutos de la Federación de Riobamba y con unos cambios adaptarla a la realidad provincial. Es así que se pusieron manos a la obra. El trámite fue realizado ante el extinto Ministerio de Previsión Social y el Ministerio de Defensa, siendo este último el encargado de conocer todo lo relacionado a las provincias limítrofes.
En la parte final, don René agradeció por la entrevista, que le permitió contar parte de sus vivencias y experiencias, que hoy forman parte de nuestra historia.