Por: Edwin Mosquera.
Ni el burro se tropieza dos veces con la misma piedra, el alza su cabeza y su magullado hocico por la soga que hace las veces de jáquima, intenta divisar las trabas que hay en el camino, para no lastimar sus patas en las piedras, cuenta así la historia de aquel animal de carga, sinónimo de torpeza y desdén, cualidad que se podría endilgar a diversos sujetos, que por más que la cagan una y otra vez, no alzan su cabeza para darse cuenta de sus yerros.
No porque se corte las orejas a un burro se convierte en caballo, peor aún por ponerse cuello blanco se es autoridad, hay que tener capacidad.
Vamos por partes, sorprende que cada semana existan eventos bochornosos que se tapan a la ciudadanía, ya desmantelaron una excavadora hace pocos días y como diría el argot popular vuelta desmantelan otra más, el enfoque no debe centrarse a los cerca de 90.000 dólares que se están perdiendo para reponer las piezas robadas, si no las consecuencias que se tienen de enviar a explotar minas sin concesión y peor aún enviar el bien mueble del estado sin resguardo o protección, acaso eso no se convertiría en cómplice por inobservancia, al pretender que los bienes públicos pueden ser utilizados al antojo de sus fines políticos y según las malas lenguas una presunta nueva postulación.
En este poco tiempo, se ha perdido el convenio de la mesa sobre la fruta del dragón, se ha despilfarrado el dinero del pueblo y por último ahora se sacan de las arcas municipales para cubrir gastos que tienen responsables con nombre y apellido, y por obvias razones no es el más vulnerable (maquinista).
Señores la solución lo es la famosa y tan ansiada re ingeniería, que lo único que acarreará son más problemas de liquidez al tener que indemnizar a los supuestos trabajadores de planta alias hermanastros que a decir de él, son el problema, pero asombrosamente las carpetas multicolores ya están listas para llenar las vacantes con otras denominaciones.
Sin duda alguna, la sinvergüencería tiene un límite, pero ya no se puede seguir viendo la cara de pendejos al pueblo, ya sacúdanse y busquen soluciones inmediatas no parches.
Y pues sigamos hasta que culmine el periodo y nuevamente se lancen los ofrecimientos vestidos de plumas.
Adelante pueblo sufrido y aguantador, que cada semana hay una nueva novedad esperemos al siguiente mes a ver si queda Municipio que llevarse.