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Antonio Vargas no le teme a la justicia, aunque lidia con muchos procesos

por Andres Ortega

Es el gran curaca del pueblo Quichwa de Pastaza Pakiru, ha sido reelecto or dos ocasiones y seguirá todavía bajo el mando que su pueblo le ha confiado.

Al hablar de los procesos en su contra, señala que cada día son más, pues siempre buscan la manera de querer hacerle daño, en el juicio civil aparece como invasor de los terrenos de la ex hacienda de té Zulay, y entonces hay una sentencia con orden de desalojo y embargo de sus bienes, pero de ¿cuál desalojo? se pregunta, si nunca ha vivido en ese lugar, su casa está en Unión Base, la cual no podrán embargarla porque está en terreno comunitario y las bienes comunitarios no son sujetos de embargo.

Vargas explica, que en realidad en el tiempo de Rafael Correa se hizo una consulta de si era posible ocupar estos predios que son del estado y para ello se cumplió con la entrega de cierta cantidad de dinero, cosa que hasta ahora no sabe qué fin tuvo y eso fue todo. Entonces en ese sentido hay una sentencia civil, pero que no pueden cumplirla porque no está apoderado de esos predios y tampoco tiene bienes para que sean embargados.

Ahora en lo que tiene que ver a los predios, han pasado nuevamente a ser un bien del estado, los supuestos dueños ya no hay tal, todo está en manos del estado y será este el que tiene que arreglar con las más de 7 mil personas que existen en su interior, ya que hacer un desalojo prácticamente será imposible.

En lo que tiene que ver al juicio penal, cuya sentencia ha sido ratificada, pero que fue apelada a la Corte Constitucional, lo que no se dice, es que la sentencia del juez, tiene que ver con hacer trabajo comunitario por tres años y no es para ir a la cárcel, como se pretende hacer creer.

Ahora no le teme, puesto que toda su vida se ha dedicado a la labor social y lo que se hizo con la hacienda Zulay fue parte de su trabajo social, para ayudar a los que no tienen, hoy por hoy, sigue haciendo labor social como dirigente de su nacionalidad, puesto que ha sido ratificado por dos ocasiones por su nacionalidad Quichwa.

Señala que, estos señores que se llamaban dueños de la hacienda, que ya no lo son, porque la propiedad como explica, ha pasado nuevamente a manos del Estado, le han formulado otros juicos más, aduciendo por daño moral, pero qué daño moral si ni siquiera les ha visto, apenas una o dos veces en los tribunales cuando ha tenido que acudir en su defensa y nada más. En definitiva no le teme, por eso sigue libre por las calles, no se ha escondido no ha pensado en huir, no ha hecho daño a nadie y se siente en paz.

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